Análisis nocturno

Esta noche, mi corazón está realizando un análisis profundo de sí mismo. Siento una pasión desmesurada por la vida y por las personas que han pasado por mi lado en los últimos años de mi existencia. Siento nostalgia, y deseo ver los ojos de quienes llenaron mis días, deseo decirles todo lo que siento y lo que sus vidas me han aportado, quiero que todo el mundo sepa lo importante que es para sí y para quienes les aprecian. Esta noche me conozco un poco más de lo que me conocía, esta noche respiro diferente y el oxígeno me llega a la boca del estómago que de alguna forma hace bombear mi corazón con más energía. Pienso en el pasado, en todo lo sentido, pienso en la vida que deseo y en lo que queda por llegar, pienso en levantarme mañana y saborear cada instante. Quiero tocar los planos físicos que me rodean como si acabara de nacer, quiero ver los ojos de las sensaciones que me enamoran. Soy sentimiento, soy emoción y poco más, lo demás no me constituye como lo hacen las sensaciones, los segundos llenos de amor. He sentido tanto placer a vuestro lado… vosotros me dais la razón para seguir, vosotros sois el sentido de todo y no me hace falta buscar nada más. Rechazo el egoísmo de mi ser, lo rechazo porque es él quien me lleva por los cauces oscuros del pesimismo y la negatividad. No me planteo nada que no tenga que ver con vosotros, para mí vosotros sois lo importante, la forma de mi entorno, mi ambiente, el ecosistema de mis pasiones. No me olvido de nadie, solo elijo mi camino y me aproximo a quienes quieren darme su energía, compartir su alegría, su seguridad y enseñarme su mundo. Un día fui otro, hoy soy otro para el otro del mañana, pero lo que me importa es que en este instante estoy lleno, me envuelve una especie de aura perfecta, donde no existe problema alguno, donde todo funciona para los anhelos de mi mente. Ya no me olvidaré de deciros lo que importa en el preciso momento en el que debería decirlo, ya no me olvidaré de lo importante que es teneros a mi lado ni de devolveros la fuerza que me prestáis cada día.